Tinita
.. Doña Asunción, la maestra de mi pueblo, se murió sin saber que existían los niños ACNEE. Pero a su escuela, que fue la mía, iba una niña que se llamaba Tinita (para todos era Tinita La Tonta). No faltaba a clase nunca y, siempre, aseada y respetuosa, aguantaba pacíficamente si nos reíamos de ella. Recuerdo que mi primer día de escuela, como yo llegué a ella, afortunadamente, sabiendo ya leer y escribir, cuando a Dª Asunción le tocaba enseñar a leer a las niñas de mi edad, a mí me mandó a preguntarle la cartilla (“Amiguitos”) a Tinita. Iba por la página del “tomate”: la T con la A, TA, con la E, TE… - Repite, Tinita... Creo que desde aquel momento supe que iba a dedicarme a enseñar algo relacionado con las letras. Tinita acabó su etapa escolar con catorce años y apenas pasó de la página del “tomate”. Dª Asunción tampoco llegó a saber que en la programación había que incluir los Temas Transversales; pero ella nos educó en la no-discriminación y en la igualdad